Capítulo 4 - Vendedor Ambulante

La estación ha cambiado a un verano temprano desde la primavera.

[… ha pasado casi dos meses, ¿huh?] Jin

Casi han pasado dos meses desde que Jin llegó a la Villa Kaina. Durante ese tiempo, él ha instalado una bomba, cavado una fuente termal, y mantenido el drenaje. Él también ha construido un remolque de bicicleta y una carretilla.

Él creó el remolque de bicicleta porque lucía como que era difícil para Hanna llevar el agua. En lo que se refiere cuando él hizo la carretilla, fue sorprendentemente conveniente y ganó popularidad, por lo que uno fue desplegado a cada familia.

Justo ahora, Jin estaba jugando un juego de atrapadas con los niños. Hasta ahora, este mundo, o al menos esta villa, no tenían el concepto de jugar. Ellos son capaces de jugar porque no hay distinción de mujeres, y ahora jugar se ha vuelto popular.

[Esta vez, Jin-niichan es el ogro.] Niño

[Bien, es mi turno. Contaré hasta 10 ahora. 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8…] Jin

Todos los niños huyeron.

[¡9… 10!] Jin

[¡Bien, aquí voy!] Jin

[¡Waaah!] Niños

Martha miraba a la conmovedora escena.

[Después de que Jin vino, esa chica, “Hana”, se ha vuelto extremadamente animada, aunque ella estaba de luto después de que sus padres murieron.] Martha

[Bien, he atrapado al primero.] Jin

Debido a la regla de incremento de ogros, los ogros gradualmente incrementaron. Terminó una vez todos se han convertido en ogros.

[¡Te atrapé, Hanna-chan~!] Jin

[¡Te atrapé, Kurt!] Jin

[¡Espera Mario!] Jin

[¡Te atraparé, Jessie!] Jin

Ellos continuaron hasta que se puso oscuro. Después de eso, ellos lavaron sus cuerpos sudorosos en la fuente termal, volviendo a casa con una mirada refrescada en sus rostros.

Recientemente, se sentía que el cabello de Hanna había estado poniéndose más lustroso. De un dorado gris a un dorado brillante. ¿Podría ser un efecto de la fuente termal? Llegando a casa, Jin siguió tras Hanna quien trotaba.

[Estoy en casa~.] Hanna

[Estamos de regreso.] Jin

[Bienvenidos, Hanna, Jin.] Martha

Martha, quien estaba preparando la cena, los saludo.

[Deben estar hambrientos, tendré algo preparado pronto.] Martha

[Perdón por tenerte haciendo mi parte todo el tiempo.] Jin

[Está bien, mi vida ha sido mucho más cómoda que como era antes gracias a ti.] Martha

En efecto, la necesidad de llevar el agua fue drásticamente reducida hasta el punto que el agua caliente de la fuente termal podía ser usada para lavar. Era considerablemente conveniente.

[¡Bien, está hecho!] Martha

[¡Wow, esto está delicioso!] Jin

El menú de hoy son huevos fritos y vegetales sofreídos.

[No hay mucha sal restante, por lo que tendrán que conformarse con esta siendo ligeramente sazonada.] Martha

Martha sonaba apologética. Oyendo eso, Jin preguntó.

[Oh, ya veo. Pero, ¿no es un problema si no hay sal?] Jin

[Está bien, puedo solo comprar algo de Roland, quien probablemente estará viniendo mañana o pasado mañana.] Martha

[¿Roland?] Jin

No siendo familiar con el nombre, Jin preguntó otra vez.

[Roland es un vendedor ambulante. Alrededor de cada dos meses, él viene a vender tela, ropas, sal o azúcar, una variedad de pescado seco, y todo tipo de comida.] Martha

[Ya veo.] Jin

Como se esperaba, parece imposible ser auto suficiente.

[Entonces necesitaré dinero.] Jin

Antes de que él pudiese decir que los rubíes que él trajo eran sus gastos de vida, Martha lo interrumpió.

[No hay necesidad de dinero, tendrás que hacer un trueque. Porque esta es una villa remota, no hay medios para obtener algún dinero.] Martha

Roland también tiene información, aunque Martha sonrió irónicamente, ella dijo eso.

*          *          *

Como Martha dijo, al día siguiente al medio día, un solo vagón apareció. Un gran vagón jalado por dos caballos.

Montándolo estaban dos personas.

El Jefe de la Villa, Gibekku, les dio la bienvenida.

[¡Oh! Roland-san, bienvenido. Eric-san no parece haber cambiado tampoco.] Gibekku

Roland lucía como un hombre robusto de 40 años, Eric era un hombre de apariencia blanda menor a los 20. Puedes decir que ellos son padre e hijo por su cabello y apariencia. Los dos llevaban una pequeña espada en sus cinturas. Probablemente para defensa personal.

[Saludos. El Jefe de la Villa también parece estar en buena salud.] Roland

[Gracias. Mi sobrina ha estado esperando por el regreso de Eric.] Gibekku

Oyendo eso, el rostro de Eric se puso rojo. Él parecía tener sentimientos por la sobrina del Jefe de la Villa. Ignorando a Eric, Roland continuó.

[Nos adelantamos a nuestro horario por alrededor de uno o dos días. Esta vez hemos traído mucha sal.] Roland

[Oohh, ¿es así? Eso es genial.] Gibekku

Antes del verano, la demanda de la sal incrementó.

Roland inmediatamente estacionó el carruaje jalado por caballos en la plaza central de la villa y colocó una simple mesa, alineando los productos sobre esta.

[Primero que nada, para la comida, hay sal, azúcar, y los comunes pescados secos. También hay esta semilla negra. Es resistente al calor por lo que puedes sembrarla ahora.] Roland

[¿Puedes darme algo de sal?] Aldeano

[Sí, es 1 bolsa de trigo por 200 gramos.] Roland

[¿Qué tal el azúcar?] Aldeano 2

[Sí, serán 20 hojas de piel por 2 kilogramos.] Roland

[¿Puedes distribuir un poco de las semillas negras como un extra?] Aldeano 3

[Oh, esto luce como un buen mineral. Te daré un pequeño extra.] Roland

Todos parecen estar intercambiando trigo y piel, y ocasionalmente el mineral de una joya. Eric impacientemente miraba.

Cuando la comida fue completamente comprada, Eric ayudó a Roland a recolocar los productos. Ahora había telas, ropas y herramientas.

Jin estaba mirando desde una pequeña distancia a lo lejos, mirando a qué tipo de herramientas estaban siendo vendidas.

[Hmm, aparte de las telas y ropas, ¿es eso una linterna? También, ¿es eso un lapicero y tinta?] Gibekku

Por cierto, el Jefe de la Villa había comprado un lapicero y tinta.

[Me gustaría hablar contigo luego si eso está bien.] Gibekku

Una conversación alrededor de afuera de la villa, y si es posible, él quería oír sobre este mundo, era lo que Jin pensaba. Al día siguiente, ellos vinieron a darle a él de lo que ellos querían hablar.

*          *          *

Después de terminar su negocio, Roland puso sus productos y mesa en el carruaje jalado por caballos.

[Bien, entonces, déjame mostrarte un agradable lugar.] Gibekku

El Jefe de la Villa dijo a las dos personas.

[¿Un lugar agradable?] Roland

[Sí, aquí es.] Gibekku

El Jefe de la Villa los guio a la fuente termal.

[¿Qué es este lugar? No estaba aquí cuando venimos la última vez, ¿verdad?] Roland

[Sí, solo fue completado hace unos pocos días. Es llamado una “Fuente Termal”.] Gibekku

[¿Una fuente termal, verdad?] Roland

[Bien, de cualquier forma, por favor entren.] Gibekku

La sensación de entrar en la fuente termal no era solo esa de agua caliente, sin necesidad de decirlo, Roland y Eric estaban sorprendidos.