El
paisaje pasaba a tal grado que era difícil decir por cuanto tiempo habíamos
estado siguiendo a las dos monturas dragón en frente de nosotros.
Desafortunadamente,
no tenía algo como un reloj conmigo, pero no más de treinta minutos habían
probablemente pasado. A pesar de movernos a tal alta velocidad, todavía había
una brecha entre nosotros y la otra montura dragón.
No
mucho después, algún tipo de villa apareció delante de las monturas de los dos
hombres de la tribu tigre.
Todavía
estábamos a una buena distancia, pero todo parecía bien hasta que el suelo
comenzó a temblar como si la horda de mongoles estuviese acercándose.
Dos
siluetas aparecieron sobre una pequeña colina en los alrededores de la villa.
Había seis hombres de la tribu tigre, aclamando por su destreza de lucha,
reteniendo a esas criaturas.
[¿Son
esos los gigantes…?] Arc
Ariane
asomó su cabeza al oír mi pregunta y echó un vistazo en frente de nosotros.
A
pesar del ruido que la montura dragón cargando generaba, yo todavía podía oír
su respiración.
[¡Kyun!
¡Kyun!] Ponta
Ponta
gritó en la dirección general de los gigantes antes de apresuradamente
enrollarse a sí misma alrededor de mi cuello.
Los
gigantes que los hombres de la tribu tigre estaban enfrentando eran ligeramente
diferente de lo que yo imaginaba.
Primero
que nada, ellos no tenían ninguna cabeza. Aparte de la falta de una cabeza, no
se parecían a los humanos como uno esperaría.
No,
aunque no he visto al animal en este mundo, una descripción más precisa sería
un gorila sin cabeza.
Ellos
tenían una altura de seis metros y sus cuerpos estaban cubiertos en pelaje
negro. Sus largos y gruesos brazos sostenían hachas de piedra y se las
arreglaron para abrir franjas de tierra con cada golpe.
En
lugar de una cabeza, estos gigantes tenían un rostro raro sobresaliendo de su
pecho.
No
tenían narices y sus ojos estaban completamente dilatados. Sus inmensas bocas
estaban llenas dientes amarillos, y en general, ellos me recordaban de un
monstruo de un show de ciencia ficción.
[Lucen
como Ewaipanomas…] Arc
Contrario
a mi descuidado comentario, la batalla entre los hombres de la tribu tigre y
los gigantes negros era una lucha violenta.
No
era posible para la tribu tigre salir de esta batalla ilesa.
Cuando
un gigante agarró a uno de los hombres, su vida fue exprimida de este. Con
tanto daño, incluso usar magia de resurrección sería un esfuerzo inútil.
Además,
en las afueras del campo de batalla, yo podía ver a esos quienes estaban muy
heridos para moverse.
Cuando
ellos captaron vista de la situación de sus aliados, los dos jinetes en frente
de nosotros incrementaron su velocidad y cargaron hacia los gigantes.
Mientras
se acercaban a los gigantes a una velocidad vertiginosa, un gemido amenazante
subió desde sus bocas.
Los
dos jinetes estaban en una carga de cabeza, y las reacciones dilatadas de uno
de los gigantes dejó el costado de su pierna expuesto. Dos conjuntos de cuernos
de montura dragón simultáneamente colisionaron con dicha pierna.
Sin
embargo, oí un aporreo seco y vi que los cuernos de las monturas dragón se
habían roto, y enviándolos volando por la colisión.
Los
cuernos de una montura dragón no me daban la impresión de objetos frágiles.
En
otras palabras, la fuerza defensiva de estos gigantes negros era
considerablemente alta.
[¡…!
Este va a ser un oponente problemático.] Chiome
Chiome
se inclinó hacia adelante en el sillín mientras ella comentaba sobre el estado
de la batalla.
Cargar
de cabeza sería una estrategia ineficaz. Aunque sería útil si pudiésemos
derribar a estas criaturas, ellas ni siquiera se movieron por el impacto
previo.
[Magia
de largo alcance será desventajosa en esta situación, deberíamos detener sus
movimientos primero.] Arc
Jalé
las riendas de nuestra montura dragón para detenernos antes de sacar la “Espada
del Trueno Sagrado” y el “Escudo Sagrado de Teutates”, y salté del sillín.
Con
la espada y el escudo en mano, corrí hacia los gigantes negros.
Ariane
y Chiome prepararon sus armas y me siguieron.
[¡Primero que nada! ¡Shield of Holy Light!] Arc
Con
un grito, invoqué una de mis habilidades de Caballero Sagrado.
Luz
se extendió desde el centro de mi escudo y cubrió todo mi cuerpo.
Nunca
he usado habilidades defensivas en este mundo antes, pero era un poco seguro
incluso si no sabía cuán efectivo sería.
Pasé
a los hombres de la tribu tigre caídos mientras estaba envuelto en luz e impedí
el avance de los gigantes negros.
[¡Ahora,
para el calentamiento! ¡Holy Light Sword Slash!] Arc
Levanté
la “Espada de Trueno Sagrado” hacia los cielos antes de desatar otra habilidad
con un pesado corte.
Una
luz deslumbrante voló desde el filo de la espada y partió el suelo como una
navaja mientras volaba hacia una de las piernas del gigante.
Un
estallido sónico acompañó el impacto mientras sangre fresca rociaba en el aire.
[¡¡Avuagiyaoaiiau!!] Gigante
Un
grito casi humano fue escupido de la boca abierta del pecho del gigante… a
pesar de que el grito mismo fue lo suficientemente fuerte para agitar la colina
en la que estábamos.
Aunque
la salpicadura de sangre era una señal de daño siendo infringido, había solo
una ligera herida en la pierna velluda y negra del gigante.
Eso
no quiere decir que el ataque no hizo nada.
El
gigante se apresuró para proteger su ahora herida pierna.
Los
ojos de los hombres de la tribu tigre luchando miraron en mi dirección por un
momento con completo asombro en sus expresiones. Era solo natura estar
sorprendido por un Caballero Plateado repentinamente entrando en la batalla.
[¡¡Estoy
aquí para ofrecer mi ayuda!!] Arc
Hablé
con un vozarrón para que todos pudiesen oírme antes de cortar la pierna del
gigante directamente. Hubo una buena respuesta mientras el sonido de huesos
agrietándose resonaba y más sangre se rociaba.
Mi
espada fue capaz de cortar hasta la mitad de la pierna del gigante. Sin
embargo, la cantidad de poder que puse en ese ataque no fue suficiente para
derribar a la bestia.
[¡¡Aoahuhhhhhooooi!!] Gigante
El
rostro del pecho del gigante se deformó en agonía mientras levantaba la pierna
que yo acababa de cortar en un último esfuerzo desesperado para protegerla.
Uno
de los hombres de la tribu tigre tomó la oportunidad para golpear con su gran
garrote sobre el dedo del otro pie del gigante.
[¡Ohh!] Arc
Aunque
yo solo capté el impacto en la esquina de mi ojo, todavía gemí mientras la
imagen de golpearme el dedo vino a la mente.
Después
de otro grito rugiente, la figura de seis metros de altura del gigante comenzó
a tambalearse.
Solo
un poco más era necesario para derribar al gigante… fue en ese momento que
Chiome usó el cuerpo del gigante como una piedra para apoyarse.
Dos
orbes de agua estaban ya formándose en sus manos.
[¡¡Estilo
de Agua: Water Spear!!] Chiome
Los
orbes en sus manos se extendieron en la forma de dos lanzas, las cuales ella
procedió a lanzar como flechas.
Las
lanzas entraron en la boca abierta del gigante y se lanzaron a sí mismas en su
garganta.
El
gigante yo no fue capaz de gritar mientras caía al suelo con un golpe sordo,
justo en frente de Ariane. Las llamas, que recorrían la longitud de la hoja de
su espada y rodeaban su cabello blanco como la nieve, estaban lo
suficientemente calientes para deformar la atmosfera.
[-
Infernal Flame, reduce todo lo que consumes a cenizas -] Ariane
En
respuesta a su cantico, las llamas que se aferraban a su espada se volvieron
incluso más intensas.
Después
de correr sobre el abdomen del gigante, Ariane levantó su espada en llamas y la
clavó en uno de los ojos del gigante.
Por
un momento, este rebotó como un resorte roto mientras sus brazos y piernas
violentamente se sacudían alrededor, pero el olor a carne quemada y humo pronto
se filtraron desde su boca.
Parecía
como que nos las arreglamos para matar a uno de ellos.
Sin
embargo, justo cuando Ariane jaló su espada del cuerpo del gigante, el hacha de
piedra del otro gigante cayó sobre ella.
Un
estallido sónico ensordecedor resonó mientras yo levantaba mi escudo y me
colocaba sobre una rodilla para rechazar el ataque.
Cuando
miré abajo, vi a Ariane mirando hacia arriba a mí con incredulidad.
[¿Está
bien, Ariane-dono?] Arc
Ella
asintió ligeramente después de que le pregunté sobre su seguridad.
Dejé
salir un suspiro de alivio antes de mirar de regreso al gigante negro.
Su
inmenso cuerpo se las había arreglado para aguantar esa última colisión. A
pesar usar ambas manos para sostener el escudo y teniendo una habilidad
defensiva activa, mis manos se sentían un poco adormecidas.
Recordando
la sensación de tomar un golpe del hacha de piedra del gigante, yo rápidamente
caí hacia atrás.
El
gigante, aparentemente desorientado, intentó retirarse también solo para que
Chiome lanzase una daga de agua a su rostro.
Uno
de los guerreros de la tribu tigre con un garrote grande sobre su hombro empezó
a gritar órdenes.
[¡¡Todos
ustedes!! ¡¡Nosotros somos los cazadores de estas llanuras, no nos quedaremos
atrás de estos forasteros!!] Hombre Tigre
Él
parecía ser el mismo quien había golpeado el dedo del pie del gigante de antes.
Los
hombres respondieron con un grito atronador mientras su líder corría a la
espalda del gigante y aplastó su pie con su garrote metálico.
El
gigante dejó salir un grito que los hombres de la tribu tigre de los
alrededores usaron como una señal para atacar. Ellos alcanzaban un número
alrededor de treinta personas.
Los
guerreros de la tribu tigre apuntaron a las piernas del gigante como nosotros
habíamos hecho, y atacando los puntos vitales de la criatura una vez ellos la
derribaron.
Después
de unos pocos minutos, dos cuerpos gigantes yacían sobre esta pequeña colina.
Mientras
los hombres de la tribu tigre elevaban un grito de victoria, el hombre que
reunió a los guerreros hace rato, me llamó.
[Déjame
expresar mi gratitud por el rescate allá atrás. ¿Eres del este y un elfo?] Ein
Dándome
cuenta hacia donde esto estaba dirigiéndose, agarré la cantimplora de mi
cintura mientras Ariane daba un paso al frente para saludar al representante de
la tribu tigre.
Un
simple encogimiento de hombro de mí parte fue todo lo que tomó para que ella
entendiese lo que yo estaba intentando hacer.
[Soy
Ariane Glenys Maple. Soy del Gran Bosque Canadá en el Continente del Norte. La
persona al lado mío igualmente proviene del Clan Blade Heart del Continente del
Norte…] Ariane
Bebí
el agua de la fuente termal a través de la pajilla mientras Ariane actuaba como
la representante de nuestro grupo. Si yo no relleno el agua pronto, se volvería
problemático en ciertas maneras.
Me
quité mi casco y me puso al lado de Ariane mientras tenía ese pensamiento.
[…
Esta persona es un elfo como yo.] Ariane
[Mi
nombre es Arc Raratoia. Soy el más nuevo miembro de nuestra villa, por favor
cuiden de mí.] Arc
[¡Kyun!] Ponta
Justo
cuando terminé mi presentación, Ponta se desenrolló a sí misma y gritó.
[…
y, esta de aquí es mi acompañante de viaje, Ponta.]
Arc
[¡Kyun!] Ponta
El
representante de la tribu tigre asintió una vez nuestras presentaciones se
terminaron, alzando su garrote sobre su hombre y presentándose a sí mismo.
[Soy
el líder del Clan Uiria, uno de los seis clanes que viven en estas llanuras. Mi
nombre es Ein Uiria. Nada me gustaría más que proveerles con una bienvenida
apropiada, pero necesitamos traer a los heridos de regreso a la villa. Por
favor esperen un poco mientras preparamos algo adecuado por su llegada.] Ein
Contesté
a Ein con un asentimiento y me puse mi casco de vuelta. Por el bien que
negociaciones más suaves, tomé su oferta. Un acto de caridad será una buena
inversión aquí.
[Ein-dono.
Conozco unas pocas técnicas de sanación y puedo ayudar a tratar a los heridos,
si usted quiere.] Arc
Ein
me miró en sorpresa cuando oyó mi comentario.
[Perdón
por preguntar, pero, ¿eres un doctor brujo también? Regresaré a la villa de una
vez y enviaré a dos mujeres aquí. Úselas como le convenga.] Ein
Ein
rápidamente volteó hacia la villa y se dirigió ahí con una sonrisa en su
rostro. Mientras mirábamos su espalda encogerse en la distancia, Ariane me miró
a mí y me hizo una pregunta.
[¿No
estás siendo un poco apresurado? Me imaginé que al menos les cobrarías…] Ariane
[Hmhmhm,
mi propósito era reunirme con la tribu tire. Además, si les muestro amabilidad
ahora, las negociaciones por las Garras del Diablo serán más suaves luego.] Arc
Ariane
encogió sus hombros y movió su cabeza a los lados a mi respuesta.
[No
pareces apegado al oro, pero eres tan persistente en perseguir comida.] Ariane
[¿No
es mejor buscar comida deliciosa como los elfos hacen, en lugar de recolectar
monedas de oro?] Arc
Una
expresión complicada apareció en el rostro de Ariane cuando ella oyó mi
respuesta.
[Necesito
escuchar tu definición de “elfos” al menos una vez…]
Ariane
Cuando
volteé para comenzar a tratar a los heridos mientras disfrutaba de la ligera
discusión de Ariane, la oí tímidamente llamándome.
[……
A-Arc, gracias por tu ayuda justo ahora.] Ariane
Sus
mejillas estaban ligeramente sonrojadas y ella estaba involuntariamente evitando
contacto visual conmigo.
Justo
ahora… Oh, ella estaba probablemente hablando sobre como yo bloqueé el ataque
del Gigante Negro con mi escudo.
[Oh……
¿Huh?] Arc
Intenté
mirarla a los ojos mientras frotaba mi barbilla, pero Ariane obstinadamente
rehusó hacer contacto visual. Yo, sin saberlo, comencé a rodearla mientras
intentaba entender esta nueva reacción.
Cuando
sentí una mirada cálida en mi espalda, volteé para encontrar a Chiome
mirándonos sin decir una palabra.
[……
Umm, procederé con el tratamiento entonces.] Arc
Incapaz
de soportar la presión de su mirada silenciosa, yo apresuradamente dejé la
situación.
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