Nunca
imaginé que encontraría chiles en esta travesía para obtener tomates en
Continente del Sur. Aunque los tomates tenían muchos usos en la cocina, chiles
rojos eran una especia versátil.
Con
ambos, tomates y chiles, yo podría hacer arrabbiata.
Varias
recetas italianas empezaron a fluir en mi cabeza, y yo frenéticamente comencé a
buscar un puesto cercano para los ingredientes necesarios e implementos de
cocina.
Ariane
vino desde atrás de mí e inclinó su cuello un poco cuando ella vio el así
llamado “garra del diablo” en mi mano.
[¿Huh?
¿Vas a comprar esos?] Ariane
[Sí,
no sabía que me cruzaría con estos aquí, y me gustaría comprar algunos si es
posible.] Arc
Ariane
lentamente volteó hacia el vendedor del puesto y preguntó el precio de los
chiles después de que yo dije eso.
Cuando
ella lo oyó, su respuesta reflejó aquella del hombre orejas de lobo de antes.
[¡Qué!
¿¡cómo puede cobrar esa ridícula cantidad!?] Ariane
Ariane
comenzó a masticar al vendedor orejas de oso, con Chiome y yo asintiendo
nuestras cabezas en concordancia.
Yo
inconscientemente alcancé mi bolsa de monedas de oro cuando oí el precio que el
vendedor había puesto.
Sin
embargo, los agudos ojos de Ariane captaron ese movimiento y sostuvo mi mano
para detenerme de hacer algo tonto.
[¿¿No
es ese precio solo una estafa??] Ariane
Mientras
presionaba al vendedor, Ariane expresó su criticismo de él a mí.
Sus
ojos dorados hablaban de cuán terrible sería comprar al precio pedido… y esa
mirada llevaba algún peso detrás.
Yo
miré a Chiome y fuertemente asentí a ella para hacerla estar de acuerdo.
Todo
mientras meditaba que hizo que el precio fuese tan escandaloso para ella.
Mientras
yo estaba contemplando las diferencias entre hombres y mujeres, el vendedor
comenzó a explicar su situación.
[Como
le dije a ese sujeto antes, el precio era más bajo de lo que lo es ahora, pero
la tribu de hombres tigre que eran mis proveedores han desaparecido y no puedo
reemplazar mi stock.] Vendedor
Oyendo
su lado de la situación explicaba porqué él estaba indispuesto a negociar el
precio.
Ya
que los chiles eran bienes secados, estos no se estropearían tan rápidamente,
por lo que el vendedor podía solo esperar por un comprador dispuesto a pagar su
precio.
Ariane
también se dio cuenta de esto y frunció el ceño de decepción.
Sin
embargo, su rostro mostraba que ella no estaba dispuesta a comprar al precio
pedido, y yo no sería capaz de comprar chiles a este paso.
Bien,
cambiemos el acercamiento un poco.
[Vendedor-dono,
¿conoce de cualquier otra tienda que lidie con garras del diablo?] Arc
Ningún
comerciante dirige su negocio a propósito a sus rivales.
El
vendedor encogió sus hombros y agitó su cabeza como era de esperarse.
[La
tribu tigre del oeste solo comenzó recientemente distribuir garras del diablo
en esta región, casi no hay otros lugares que los vendan. Si piensa que estoy
mintiendo, es bienvenido a buscar en el mercado por usted mismo.] Vendedor
El
vendedor esnifó y rompió contacto visual mientras cruzaba sus brazos, por lo
que yo volteé hacia Ariane para ver lo que ella sabía.
Ella
asintió y concordó con lo que el vendedor había dicho.
[Nunca
los he visto antes. No te cruzas con ellos en Canadá al menos…] Ariane
[Entonces,
¿Dónde puedo encontrar a la tribu tigre para comprar las garras directamente?] Arc
Incluso
con una breve mirada alrededor del mercado, yo no pude encontrar ninguna
persona orejas de tigre.
Si
el vendedor me dijese donde encontrar a la tribu tigre, la situación se
resolvería por sí misma, pero él permaneció en silencio y me dejó continuar mi
investigación en vano.
Era
solo natural para un cliente buscar al productor de un bien que ellos buscaban
en esta situación.
Sin
embargo, el vendedor no tenía razón para decirme nada.
Mientras
yo intentaba salir con una manera para hacer caer al vendedor, Ariane se metió
en la conversación.
[Arc,
¿por qué quieres comprar estas cosas? De lo que oí, estas cosas son peligrosas,
¿correcto? La misma cosa con el Kraken, ¿por qué solo estás interesado en las
cosas extrañas?] Ariane
Ariane
parecía un poco desconcertada por mi comportamiento, pero fueron Chiome y Ponta
que objetaron a su comentario.
[…
¡El Kraken es delicioso!] Chiome
[¡Kyun!] Ponta
Había
una seria mirada en sus ojos azules claros mientras Chiome y la bola de pelos
sobre mi cabeza de pie en solidaridad.
Aunque
ellas fallaron el punto, acepté su respaldo y sostuve el chile en mi mano.
[Puedes
hacer varias cosas deliciosas al usar esto y los tomates. Por lo tanto, me
gustaría comprar algunos a un precio más razonable.]
Arc
Ariane
levantó una ceja a lo que dije. Pero el vendedor reaccionó antes de que ella
pudiese decir algo.
[¿¡Estás
planeando cocinar con garras del diablo!? ¡Esos de la tribu tigre las usan para
incrementar sus espíritus de lucha al cocinarlos, pero casi nadie más lo hace!] Vendedor
Miré
adelante al sorprendido vendedor y le pregunté que diese detalles.
[Entonces,
¿para qué más son usadas las garras del diablo además de cocinar?] Arc
Yo
no podía pensar de ningún otro uso para ellos de momento.
Chiome
y Ariane miraban entre mí y el vendedor mientras nuestra conversación había
captado su interés.
[Ellos
son usualmente hervidos hasta que ellos se destiñen, y los jugos son usados
como un repelente de monstruos e insectos. También oí que estrujándolos en tu
nariz puede temporalmente incrementar la fuerza de uno.] Vendedor
Si
no me equivoco, entonces la capsaicina en los chiles rojos tenía propiedades
antisépticas, así como siendo un insecticida efectivo, pero ¿estrujarlos en tu
nariz? ¿era algún tipo de maldición?
Sin
embargo, entiendo. Los miembros de la tribu tigre se rumoreaba que los usaban
para cocinar, pero la confirmación de ese hecho no había llegado a esta ciudad
todavía.
[Ya
que solo los extremadamente curiosos estarían interesados en estos, no hay
necesidad de esconder al proveedor. Todo lo que tengo que hacer es preguntar
alrededor sobre la tribu tigre para encontrarlos.] Vendedor
El
vendedor dijo que los miembros de la tribu no habían sido vistos alrededor de
aquí recientemente, pero debería ser fácil encontrar una pista sobre su
ubicación y comprar las garras del diablo directamente.
Empecé
a mirar hacia los otros vendedores con ese pensamiento en mente.
Entonces,
el vendedor orejas de oso suspiró y rascó la parte trasera de su cabeza.
[Hah,
eso es verdad. La tribu tigre principalmente comercia con cuero y colmillos de
monstruos. Ellos usualmente residen en las planicies Kuwana, justo más allá de
las planicies Shingarika. La tribu es a menudo avistada alrededor de Fernandez,
justo al oeste de aquí. Si sigues el río Dojasu, deberías alcanzarlo.] Vendedor
Algo
reacio, el vendedor reveló la ubicación de los miembros de la tribu tigre.
Yo
era ignorante de la geografía de este continente, por lo que volteé a Ariane
cuando oí el nombre de la ciudad, pero ella tampoco era familiar con estos
lugares por lo que ella solo agitó su cabeza.
[Fernandez
está a diez días de distancia en carruaje y a veinte días a pie. ¿En verdad
planeas hacer tal viaje?] Vendedor
Una
sonrisa paternal flotó en el rostro del vendedor, mientras Ariane
silenciosamente miraba.
Había
una buena distancia a cubrir para llegar a la ciudad. La sonrisa del vendedor
se amplió mientras él estaba seguro de su victoria. Incluso si nosotros
atravesásemos las dificultades de llegar a la ciudad, no había garantía que
nosotros podríamos comprar los artículos a un precio más barato.
Mi
magia de transferencia de corta distancia, “Dimensional Step”, debería ser
capaz de lidiar con el problema de la distancia. Yo había supuesto que tomaría
tres días alcanzar la ciudad de Fernandez al usar eso.
Mientras
yo pensaban sobre ello, la mirada de Ariane aterrizó sobre el equipaje sobre mi
hombro.
[Arc.
Tienes algunas piedras mágicas en tu bolsa, ¿correcto?]
Ariane
A
su pregunta, yo me acordé de las piedras mágicas que yo había recolectado en
las cavernas antes de que nosotros nos descubriésemos ese lago subterráneo.
Debido a la naturaleza pintoresca del lago subterráneo, yo debería ser capaz de
usar “Transfer Gate” y recolectar algunas más de ellas en tanto un viaje
intercontinental no fuese un problema.
Asentí
a su pregunta considerando todo eso.
[Tengo
unas pocas de ellas, ¿necesita un número específico de ellas?] Arc
Todavía
incapaz de ver sus intenciones, le di a ella una respuesta franca que se las
arregló para poner una sonrisa en sus suculentos labios.
Ella
parece haber pensado en algo…
[Sígueme,
Arc. Ya que estamos aquí, podríamos también estirar nuestras piernas.] Ariane
Ariane
volteó sus tobillos y comenzó a caminar lejos del vendedor.
[¡V-voy!] Arc
Antes
de que el vendedor pudiese quejarse sobre la partida de ella, yo saqué una
moneda de oro y se la entregué a él.
[Lo
siento, Vendedor-dono. ¿Podría darme cualquiera sea la cantidad de Garras del
Diablo que esto cubre?] Arc
La
razón que yo cedí fue como un agradecimiento por la información sobre la tribu
tigre y yo todavía quería una muestra de los chiles.
El
vendedor reconoció que ya no había más espacio para las negociaciones mientras
él miraba a Ariane alejarse, por lo que él reaciamente tomó la moneda de oro.
Aunque
él sospechaba un poco de la moneda cuando él vio el emblema grabado sobre ella,
después de que yo le expliqué que era del Reino humano en el Continente del
Norte, el intercambio llegó a un fin.
Se
me entregó varias Garras del Diablo a cambio, y después de usar la moneda de
oro con la que yo había pagado para calcular el precio por una de ellas, el
mero pensamiento de comprarlas en masa me paralizó.
Incluso
si el intercambio de dinero fuese tomado en cuenta, yo se me acaba de entregar
un paquete valioso de Garras del Diablo con nada del valor.
Un
precio que alcanzaba el valor del oro, yo no podía evitar recordar cómo yo
había oído una vez que el chile había costado su peso en oro en el pasado.
[No,
a estas tarifas el oro no es la unidad apropiada…] Arc
Mi
mano se movió a mi bolsa de dinero mientras yo miraba a las Garras del Diablo.
Cuando
alcancé a Ariane y a Chiome, les pregunté lo que ella tenía en mente.
[¿Dónde
vamos?] Arc
[¿Recuerdas
lo que te dije antes de venir aquí? Aunque no debería haber muchos de ellos,
debería haber una red de santuarios de transferencia instalada en este país. No
sé si podemos directamente viajar a Fernandez, pero debería ser más rápido que
tomar la carretera, ¿correcto?] Ariane
Ariane
levantó su ceja mientras ella miraba atrás en mi dirección. Chiome se devolvió
cuando ella recordó esa conversación.
Yo
me quejé un poco cuando ella sacó esa conversación de no hace mucho.
[Hmm,
ya veo. La única pregunta es si la red de santuarios está abierta al público.] Arc
[Ya
que usarlas requiere a un anciano de la villa para otorgar el permiso, ¿cuáles
son las chances actuales de nosotros siendo permitidos de viajar a Fernandez?] Chiome
El
estatus de Ariane como hija de un anciano de villa probablemente le permitía a
ella ganar el acceso necesario a la red de santuarios, una ventaja que nosotros
carecíamos aquí.
Si
la red de santuarios estuviese abierta al público, significaría que un sistema
de administración más libre estaba en el lugar.
Por
ahora, empujé esos pensamientos aparte y le presté atención a la calle en la
que nos estábamos dirigiendo. Ambos lados de la calle estaban alineados con
edificios de tres pisos de altura y tenían varios tipos de hombres bestias
yendo en sus negocios.
Aunque
fue en realidad un carruaje peculiar el que captó mi atención. Si tú pudieses
llamarlo un carruaje, eso es…
No
había ni un solo caballo atado al chasis.
En
su lugar, había una criatura como cabra jalándolo. La criatura tenía dos
cuernos de carnero sacudiéndose desde su cabeza y estaba cubierta en piel negra
como seda por todas partes excepto su rostro.
Sin
embargo, la criatura era del tamaño de un caballo y no mostraba esfuerzo
mientras jalaba el carruaje completamente lleno.
Había
dos guardias hombres bestias protegiendo el carruaje. Ellos vestían uniformes a
juego y tenían espadas atadas a sus cinturas mientras ellos montaban aves de
dos metros de altura. La altura del ave les permitía a ellos fácilmente ver
sobre las cabezas de la multitud. Las alas de las aves eran un poco pequeñas
comparadas a sus cuerpos y sus plumas eran de un color café oscuro excepto por
sus cabezas blancas. Este rasgo, emparejado con sus picos amarillos dibujaban
la imagen de águilas calvas en mi mente.
[Hmm,
debería haber esperado encontrar animales desconocidos aquí.] Arc
[¡Kyun!] Ponta
[Estas
aves como caballos parecen ser corredores veloces.]
Chiome
Ariane
nos llamó a Chiome, Ponta y a mí cuando nos detuvimos para evaluar el carruaje
pasándonos.
[¡Arc,
Chiome-chan, el sol se ocultará si no nos apresuramos!]
Ariane
Después
de confirmar donde nos dirigíamos, Ariane nos instó a continuar nuestro camino
a través de la multitud.
Después
de una hora de caminar, llegamos al centro de la ciudad donde un gran edificio
solemne se erigía en el centro del pequeño campo.
El
aparentemente edificio del Medio Oriental estaba hecho de una piedra color
lapislázuli decorado con patrones brillantes de filigrana. Había una estación
de revisión de equipaje en frente de la entrada del edificio y los guardias
podían ser vistos todos alrededor del área.
[Esta
parece ser la red de santuario de transferencia de este país.] Ariane
Ariane
hizo ese comentario mientras se acercaba al portón principal, con el resto de
nosotros en fila.
El
edificio en frente de nosotros era más como un templo que un santuario.
Mientras
nos acercábamos a la entrada del “santuario” mágico de transferencia, uno de
los guardias hombre bestia le dio a Ariane una extraña mirada antes de
separarnos.
[Es
inusual ver a una elfa oscura alrededor de aquí, ¿estás planeando usar la
formación de transferencia?] Guardia
Ariane
asintió a la pregunta del guardia antes de hacer la propia.
[Sí,
¿es posible alcanzar Fernandez o una ciudad cercana?]
Ariane
[Puedes
transferirte a Fernandez, pero es imposible hoy. Las dos formaciones de hoy
están vinculadas a la Ciudad Capital, Galápagos.] Guardia
El
guardia hizo gesto a la línea de personas en la entrada con su barbilla
mientras hablaba.
De
acuerdo a él, la formación era frecuentemente ajustada a la Capital, visto que
las transferencias a otras ciudades estaban solo disponibles para un número
limitado de personas cada día.
Pero,
más importante, la Capital fue llamada como las islas en que la teoría de la
evolución estaba basada.
[Los
tres ustedes excederán el límite de personas para la transferencia a Fernandez
de mañana. Sugiero que regresen en dos días cuando el horario se abra. Ustedes
también pueden pagar la mitad de la tarifa por adelantado para que sus nombres
sean colocados en el registro.] Guardia
Así
fue como la pregunta de Ariane fue contestada.
Dada
las circunstancias, hacer eso debería costar una considerable cantidad de
dinero. Aunque el precio parecía escalar con la cantidad de tu equipaje, las
monedas que teníamos no eran adecuadas para una circulación mayor.
Se
sentía como que estábamos siendo presentados con el costo de viaje al
extranjero de los principios del período Showa.
[¿Es
posible pagar la tarifa con piedras mágicas?] Ariane
[Sí,
hay una estación de evaluación al lado que puede determinar un punto de
precio.] Guardia
El
guardia nos guio a la estación antes de regresar a su puesto.
La
estación en frente de nosotros evaluaría las piedras mágicas y calcularía la
tarifa de uso basado en su calidad. Si éramos lo suficientemente afortunados,
entonces el costo podría ser cubierto por las piedras que yo traje conmigo.
Después
de entregar todas las piedras mágicas que yo tenía para su evaluación, estas
fueron intercambiadas por su valor monetario. Resultó que la reservación solo
costaba la mitad del pago, por lo que yo guardé la diferencia.
También
se nos entregó placas de madera marcadas para la formación de transferencia.
Básicamente, algún tipo de pasaporte.
[Esto
debería encargarse de nuestros gastos en este país por un tiempo…] Arc
La
bolsa de cuero en mi mano mantenía el dinero y el pasaporte que acabábamos de
recibir, y yo miré atrás a Ariane y a Chiome mientras hablaba.
[El
grupo yendo a Fernandez no será anunciado hasta el mediodía de mañana, por lo
que viajar afuera de esta ciudad está restringido. Deberíamos encontrar una
posada en algún lado.] Ariane
Cuando
alcanzamos la plaza de la ciudad, Ariane cruzó sus brazos y empezó a mirar
alrededor del área mientras ella mencionaba el horario.
Chiome
inquietamente se movía alrededor mientras ella estaba de pie al lado mío.
[¿Pasa
algo malo, Chiome-dono?] Arc
[N-no.
Yo estaba pensando sobre lo que aprendimos sobre la tribu tigre. De lo que oí,
la tribu tigre sobresale en artes marciales. Solo hay unos pocos de ellos en el
Continente del Note, por lo que nunca me he encontrado con uno antes.] Chiome
Chiome
lucía como un chico ansioso por reunirse con su héroe con su inusual rostro
expresivo.
Mientras
yo la miraba, la imagen de un gigante musculoso repentinamente apareció al lado
de ella, acompañado por una sensación de deja vu.
[De
acuerdo al vendedor, ellos no habían estado haciendo tantas apariciones
recientemente… Espero que puedas encontrarlos, Chiome-dono. A mí también me
gustaría comprar más Garras del Diablo de ellos.] Arc
Cuando
ella oyó esto, Ariane apuntó un dedo a mí en protesta.
[Arc,
¿en verdad compraste algunas Garras del Diablo de ese vendedor? Pensé que tú
encontraste a la ubicación de la tribu tigre para que pudieses comprar al por
mayor.] Ariane
Ariane
infló su pecho y puso mala cara en disgusto mientras hablaba.
Aunque
ella ya se había ido para entonces, sus excelentes sentidos de guerrera y
razonamiento deductivo no deberían ser sobreestimados.
[Compré
unas pocas de ellas para muestreo. Yo estaba pensando en comprar los materiales
necesarios en el mercado y cocinar algo con las Garras del Diablo.] Arc
Agarré
mi puño mientras hablaba, pero Chiome y Ariane me dieron una mirada confundida.
[Arc,
¿puedes cocinar?] Ariane
Su
pregunta era en realidad razonable cuando yo pensé sobre ello.
Yo
no he cocinado nada por mí mismo desde que vine a este mundo. Sin embargo, yo
había vivido solo por muchos años… y me volví bastante competente en mi cocina
debido a eso.
[Hmhmhm,
déjenme mostrarles mi habilidad. ¡Todas ustedes serán testigos de mis
habilidades de cocina!] Arc
Ya
que ha pasado un tiempo desde la última vez que cociné, hagamos algo de pasta
arrabbiata con las Garras del Diablo y tomates. Recuerdo que el ajo y cebollas
estaban disponibles en el mercado, por lo que estas deberían ser fácilmente
obtenibles.
[¡Kyun!
¡Kyun!] Ponta
Dándose
cuenta de lo que estaba sucediendo, Ponta comenzó a felizmente agitar su cola y
a gritar sobre mi cabeza.
Las
Garras del Diablo podrían ser un poco demasiado para Ponta, por lo que necesito
removerlas de su porción.
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